sábado, 23 de marzo de 2013

Le Marseillaise , La Marsellesa


En esta segunda entrada hacemos referencia al himno de Francia, conocido como La Marsellesa.

Fuera connotaciones políticas, el objetivo de este blog es dar a conocer los himnos, su historia, anécdotas y sobre todo sentir una vez más citas como una Eurocopa ó un Mundial,  donde todos los amantes del fútbol sentimos un pellizco en el estómago cuando los equipos, independientemente de nuestros sentimientos,  se cuadran para escuchar ó entonar sus himnos  mientras los aficionados los alientan dando vida, calor y color a un estadio con respeto y admiración. Luego viene el CLAMOR.


La Marsellesa, originariamente canto de guerra revolucionario e himno a la libertad, se impuso progresivamente como himno nacional. 

La historia


En 1792, tras la declaración de guerra del Rey a Austria, cuando el batallón "Les enfants de la Patrie" se atrincheró en Estrasburgo mientras se encontraba defendiendo la plaza Fuerte, un oficial francés, Rouget de l’Isle, compone, en la noche del 25 al 26 de abril, en casa de Dietrich, alcalde de la ciudad, un "Canto de guerra para el ejército del Rin".

La inspiración le vino a Rouget de Lisle de un póster de los amigos de la Constitución distribuido el 25 de abril en Estrasburgo, que tenía los versos Aux armes citoyens! L'étendard de la guerre est déployé: le signal est donné. Aux armes! (A las armas, ciudadanos! La bandera de la guerra se despliega: se da la señal. a las armas).

El General François Mireur del Cuerpo Egipcio, que se encontraba de paso por Marsella preparando la marcha conjunta de los voluntarios de Montpellier y los de esa ciudad hizo imprimirla con el título "Chant de Guerre pour les Armées aux Frontières" e inmediatamente los marselleses la adoptaron como su canto de guerra. Al entrar a París el 30 de julio de 1792 lo hicieron marchando y cantando su himno y sin dudarlo los parisienses la llamaron "La Marseillaise", nombre con la que se le conoció desde entonces.

Su éxito es tal, que se lo declara "canto nacional" el 14 de julio de 1795.

La Marsellesa,  el primero himno que no nombra a Dios, fue prohibida durante el Imperio y la Restauración, posteriormente es rehabilitada por la revolución de 1830, y Berlioz elabora una orquestación, que dedica a Rouget de l’Isle.

La Tercera República (1879) la proclama himno nacional, y en 1887 el ministerio de Guerra, después de consultar con una comisión, adopta una "versión oficial" de la misma.

Durante la Tercera República, asimismo, los restos de Rouget de l’Isle son trasladados a los Inválidos.
En septiembre de 1944, una circular del ministerio de Educación Nacional recomienda que se cante la Marsellesa en las escuelas "para celebrar nuestra liberación y nuestros mártires".
Las constituciones de 1946 y de 1958 (artículo 2) ratifican su carácter de himno nacional.

El autor


Portada de una partitura de la Marsellesa. París, Bonoldi, Hacia 1840 Nacido en 1760 en Lons-le-Saunier, Claude-Joseph Rouget de l’Isle es capitán del Cuerpo de Ingenieros, pero su carrera militar es bastante breve. Revolucionario moderado, se salva del Terror gracias al éxito de su canto. Autor de romanzas y de algunas óperas, vive oscuramente durante el Imperio y la Restauración, hasta su muerte en Choisy-le-Roi en 1836.

En pocas semanas, el "Himno de los Marselleses" se difunde en Alsacia en forma manuscrita o impresa, y pronto es publicado por numerosos editores parisienses. El carácter anónimo de las primeras ediciones dio lugar a que se dudara de que Rouget de l’Isle, compositor más bien mediocre, fuera realmente su autor.

No existe una versión única de la Marsellesa: desde el principio, ésta fue puesta en música en diversas formas, con o sin canto. Por eso, al ser declarada himno oficial en 1879 sin que se especificara la versión, podía producirse un gran desorden musical cuando se reunían diferentes formaciones.
La comisión de 1887, compuesta de músicos profesionales, determinó una versión oficial, después de revisar su línea melódica y su armonización.
El Presidente Valéry Giscard d’Estaing quiso volver a una ejecución más cercana a los orígenes de la obra y le impuso un tempo más lento. Actualmente se ejecuta en las ceremonias oficiales una adaptación de la versión de 1887.
Paralelamente,  ha sido adaptada por músicos de variedades y de jazz.

La letra de Le Marseillaise que habla de sangrientas batallas y el llamado a la ciudadanía a tomar las armas, ha sido motivo de encendidos debates para hacerla más acorde a los tiempos de paz que vive Francia, pero el sentido de los versos originales que conllevan el espíritu de la Revolución Francesa, se mantienen.



Son continuos los casos acerca de si los futbolistas entonan ó no su  letra previamente a los partidos.  De cara a la anterior Eurocopa 2012, Laurent Blanc, seleccionador galó incitó a todos sus jugadores entonar el himno nacional facilitándole la letra de La Marsellesa


El último caso es el de Karim Benzema, delantero del Real Madrid, que ha afirmado que nunca le obligarán a actuar La Marsellesa. Actualmente, Franck Ribéry tampoco lo canta.


Entre los jugadores que disputaron de inicio la final del Mundial´98 contra Brasil, Christian Karembeu y Zinedine Zidane también permanecieron en silencio.


Mientras en el palco, el actual presidente de la UEFA, Michel Platini, no cantó la Marsellesa cuando sonó el himno francés en París antes de la final del Mundial '98, torneo del que era copresidente del Comité Organizador. Su imagen contrasta con la de Jacques Chirac, entonces presidente de la República, y Lionel Jospin, primer ministro, quienes cantan la Marsellesa con entusiasmo.


Además, se mostró una entrevista de diciembre de 2010 en la que le transmitió la pregunta a Platini de por qué nunca cantó el himno nacional galo. "Yo nunca lo hice. Que no cantes La Marsellesa no significa que no te puedas sentir profundamente francés", explicó el máximo dirigente del fútbol europeo.








Letra en francés

Allons enfants de la Patrie,
Le jour de gloire est arrivé!
Contre nous de la tyrannie,
L'étendard sanglant est levé,(bis)
Entendez-vous dans les campagnes,
Mugir ces féroces soldats?
Ils viennent jusque dans vos bras,
Égorger nos fils, nos compagnes!
Letra en español

¡Marchemos, hijos de la patria,
El día de gloria ha llegado!
Contra nosotros la tiranía,
El estandarte sangriento se ha alzado,(bis)
¿Escuchais vosotros en las campiñas,
rugir a esos feroces soldados?
ellos vienen hasta vuestros brazos,
A degollar a nuestros hijos y compañeras!
Refrain:
Aux armes, citoyens,
Formez vos bataillons,
Marchons, marchons!
Qu'un sang impur
Abreuve nos sillons!
Aux armes, citoyens,
Formez vos bataillons,
Marchons, marchons!
Qu'un sang impur
Abreuve nos sillons!
Estribillo:
¡A las armas, ciudadanos!
¡Formad vuestros batallones!
Marchad, marchad,
¡Que una sangre impura
empape nuestro camino!
¡A las armas, ciudadanos!
¡Formad vuestros batallones!
Marchad, marchad,
¡Que una sangre impura
empape nuestro camino!
Que veut cette horde d'esclaves,
De traîtres, de rois conjurés ?
Pour qui ces ignobles entraves,
Ces fers dès longtemps préparés ? (bis)
Français ! pour nous, ah ! quel outrage !
Quels transports il doit exciter !
C'est nous qu'on ose méditer
De rendre à l'antique esclavage !
¿Qué pretende esa horda de esclavos,
de traidores, de reyes conjurados?
¿Para quién son esas innobles trabas,
y esas cadenas tiempo ha preparadas? (bis)
¡Para nosotros, franceses ! ¡Oh, qué ultraje !
¡Ningún arrebato debe exaltarnos!
Es a nosotros a quienes pretenden sumir
De nuevo en la antigua esclavitud.
Refrain
Quoi! ces cohortes étrangères !
Feraient la loi dans nos foyers !
Quoi! ces phalanges mercenaires
Terrasseraient nos fiers guerriers ! (bis)
Grand Dieu! par des mains enchaînées
Nos fronts sous le joug se ploieraient !
De vils despotes deviendraient
Les maîtres des destinées !
Estribillo
¡Qué! ¡esas tropas extranjeras!
¡dictan la ley en nuestros hogares!
¡Qué! ¡esas falanges mercenarias
vencen nuestros valientes guerreros! (bis)
¡Gran Dios! ¡Con las manos encadenadas
nuestros frentes bajo el yugo se doblegarían!
¡Los viles déspotas llegarían a ser
los maestros del destino!
Refrain
Tremblez, tyrans et vous perfides
L'opprobre de tous les partis
Tremblez ! vos projets parricides
Vont enfin recevoir leurs prix ! (bis)
Tout est soldat pour vous combattre
S'ils tombent, nos jeunes héros
La France en produit de nouveaux,
Contre vous tout prêts à se battre
Estribillo
¡Temblad, tiranos, y también vosotros, pérfidos,
Oprobio de todos los partidos!
¡Temblad! Vuestros actos parricidas
van al fin a recibir su castigo. (bis)
Todos son soldados para combatiros
Si perecen nuestros héroes,
Francia produce otros nuevos
siempre dispuestos a luchar contra vosotros.
Refrain
Français, en guerriers magnanimes,
Portez ou retenez vos coups !
Épargnez ces tristes victimes,
A regret s'armant contre nous. (bis)
Mais le despote sanguinaire,
Mais les complices de Bouillé
Tous ces tigres qui, sans pitié,
Déchirent le sein de leur mère !...
Estribillo'
¡Franceses, como magnánimos guerreros
sufrid o rechazad los golpes!
Perdonad a estas pobres víctimas
que contra su voluntad se arman contra nosotros. (bis)
¡Mas el déspota sanguinario,
Mas los cómplices de Bouillé,
todos esos tigres que, sin piedad,
desgarran el corazón de su madre!...
Refrain
Amour sacré de la Patrie,
Conduis, soutiens nos bras vengeurs !
Liberté, Liberté chérie,
Combats avec tes défenseurs ! (bis)
Sous nos drapeaux, que la victoire
Accoure à tes mâles accents !
Que tes ennemis expirants
Voient ton triomphe et notre gloire !
Estribillo
¡Amor sacro de la patria,
conducid y sostenéd nuestros brazos vengadores!
¡Libertad, libertad querida,
lucha junto a tus defensores (bis)
¡Bajo nuestras banderas, que la victoria
acuda a tus valientes llamadas!
¡Que tus enemigos moribundos
vean tu triunfo y nuestra gloria!
Refrain
("Couplet des enfants")
Nous entrerons dans la carrière
Quand nos aînés n'y seront plus,
Nous y trouverons leur poussière
Et la trace de leurs vertus (bis)
Bien moins jaloux de leur survivre
Que de partager leur cercueil,
Nous aurons le sublime orgueil
De les venger ou de les suivre !
Estribillo
("Estrofa de los niños")
Nosotros tomaremos el camino
cuando nuestros mayores ya no estén,
Allí encontraremos sus cenizas
y la huella de sus virtudes. (bis)
No estaremos tan celosos de sobrevivirles
Como de compartir su tumba;
¡Nosotros tendremos el sublime orgullo
de vengarlos o seguirlos!
Refrain
Estribillo